Hola LASOLUCIÓN:
Lo siento..., pero no has descubierto la pólvora. Ni la clave de nada
Como ya se ha dicho otras veces, si la agencia es seria, no sólo será obligatorio firmar con ellos el "parte de visita" (o como se le quiera llamar), sino que para ello pedirán el DNI a la persona que lo firma y se hará la pertinente comprobación. Y lo normal es que esto se haga en la oficina. Como dice un conocido mío, dueño de una conocidísima empresa en mi zona: "con los clientes se queda en la oficina, no por las esquinas". Y como les he dicho siempre a los interesados en visitar un piso a quienes les extrañaba que les dijera que tenían que pasarse por mi oficina si querían más información (y más aún si el interés era visitarlo) del inmueble por el que preguntaban: si tengo una oficina abierta, es para atender en ella a los clientes. Y mi OBLIGACIÓN como profesional no es abrir puertas ni acompañar a nadie a dar vueltas por un piso (por Dios, que los clientes suelen ser personas adultas capaces de diferenciar el baño de la terraza e interpretar que el salón no es independiente al pasar por él, y que los pisos tienen 70 m2 de media, no se va a perder nadie), mi obligación pasa por saber PERFECTAMENTE qué es lo que en teoría quisiera comprar el cliente y qué es lo que PUEDE comprar en base a sus condiciones económicas personales. Obviamente, el comercial (dejémonos de terminología rebuscada: la mayor parte de l@s chic@s que enseñan los pisos son, eso, comerciales que cobrarán en base a que el cliente finalmente formalice la compra del inmueble que visitaron con el/ella. Lo de "asesores inmobiliarios"..., en fin), pues eso, el comercial queda en el portal con el cliente (a veces, en el portal de al lado, ó el de enfrente) porque si queda con él en la oficina, igual lo atiende otro compañero..., y en el mejor de los casos, lo mismo hay que repartir comisión (ya digo que a gran parte de ellos, sobre todo los que trabajan en redes de oficinas, en delegaciones franquiciadas..., ésas que siempre necesitan docenas de empleados todas las semanas, se les paga no por formalizar la operación ellos mismos, sino en base a haber atendido al cliente y haberle enseñado pisos). Y ese comercial difícilmente va a echar cuentas al cliente, le va a preguntar antes qué ahorro personal tiene para dar de entrada, aparte de los gastos de escritura, si tiene ó no avalistas, si tiene ó no la residencia en España. Lo que quiere es enseñar pisos, como sea, para acreditar ante sus jef@s que si no se vende, no será porque él no ha enseñado pisos esa semana. Y si ese cliente no ha comprado, no será porque no ha visto docenas de pisos con ellos (igual resulta que el cliente es de los que vé pisos para pasar el sábado, que los hay; ó es un espía de la competencia, que los hay; ó no podría comprar nada porque no tiene ingresos ni para comprar una lavadora a plazos, ó porque está en el RAI, ó porque para comprar deberá tener primero vendida su vivienda..., que los hay).
Los que nos dedicamos a esto de forma profesional, esto es, lo que somos Intermediarios en el sector inmobiliario de segundamano (ni promotores ni constructores), no vendemos nada. El cliente compra con nuestra mediación, ó no. Quien vende es el propietario...
...y por el propietario es por lo que realmente se firman los partes de visita. Porque con el propietario se ha suscrito un compromiso de gestión de venta de su inmueble que incluye eso, filtrar las visitas e informarle puntualmente de quién va a su casa y con qué intenciones. Normalmente, interesado en visitarla porque está buscando una vivienda para comprar, y porque en base a lo que le gustaría y podría pagar, esa vivienda en concreto se ajusta a sus deseos, y obviamente quiere verla por dentro para descartarla por algo ó seleccionarla. Pero no todo el que va a visitar viviendas va con esa intención. Ya digo que hay quienes empieza a ver pisos hoy porque piensa comprar dentro de año y medio... y quiere ir haciéndose a la idea de cómo son por dentro. Y quienes ven pisos como quien va a ver escaparates ó al cine. Los pisos en edificios "caros" ó de aspecto singular atraen muchos curiosos: algunos te lo dicen tal cual. Y también están los que parecen muy interesados en medir la distancia entre el tubo del gas y el acceso a la ventana de la cocina, preguntan si en la vivienda de al lado no vive nadie, como parece, y por la seguridad de la puerta de entrada..., e insisten en visitar la vivienda a deshoras... ¿igual para detectar en qué momento estará vacía? Y algunos se asombrarían de la de padres de crías adolescentes que me han hecho prometer que los posibles interesados en visitar el piso vendrían acompañados por mí (ni siquiera por un empleado de la oficina varón), y que evitase que fueran hombres solos a determinadas horas en que la chica podría estar sola en el piso...
Pues para todo esto se suele firmar el parte de visita, entre otras cosas.
¿Que hay quienes ni hacen firmar nada, quedan con el cliente en el portal, el dueño no tiene ni idea de qué agencia es la que viene, dan el teléfono casi dictado...? Pues con esos mejor evitar ver pisos. No ya pensar en conseguir direcciones a través de ellos...., sino evitarlos directamente. Porque si no preguntan nada al comprador, igual al vendedor tampoco le han preguntando... y cualquiera sabe qué tipo de viviendas estarán intentando vender.
Y un último punto: a las agencias se les puede preguntar SIEMPRE qué comisión cobran y a cambio de qué contraprestaciones. Antes de que nos hagan firmar nada ni nos hablen de viviendas. Y no firmar nada NUNCA sin haberlo leído detalladamente y preguntando lo que se dude. Y por eso es tan importante no hacerlo tras haber visto el piso. Se queda en la oficina, se lee el documento bien, y, si nos interesan la condiciones en que la agencia trabaja, se visitan pisos con ella. Y, sino..., en el mercado sobran pisos cuyos dueños anuncian directamente.
Un saludo